Las matriculaciones de caravanas, autocaravanas y campers siguen lastradas por la pandemia de coronavirus, pero, durante mayo de 2020, se ha registrado una cierta reactivación, según los datos ofrecidos por la Asociación Española de la Industria y Comercio de Caravaning (Aseicar).
Las primeras semanas de desconfinamiento progresivo han ayudado a retomar la actividad de un sector que se había visto prácticamente paralizado desde que comenzó el Estado de Alarma. Esta reactivación paulatina ha propiciado que, en mayo de 2020, se matricularan 91 caravanas, 207 autocaravanas y 94 campers. Además, los vehículos de importación (usados, pero de primera matriculación en España) fueron 59 autocaravanas y 6 campers.
José Manuel Jurado, presidente de Aseicar, ha constatado que la mayoría de las empresas del sector “no han retomado su actividad hasta hace una o dos semanas y, además, lo han hecho bajo las restricciones de la cita previa y la movilidad de los clientes solo en la provincia”.
Los datos de mayo de 2020 representan un descenso superior al 60% respecto al mismo mes del año anterior, pero la comparación está condicionada por la COVID-19 y sus importantes consecuencias sanitarias, económicas y sociales. Por tanto, es muy posible que la incertidumbre siga presente durante los próximos meses, al menos hasta que haya una vacuna contra esta enfermedad.
Aun así, se cree que el turismo de caravaning va a ser uno de los más utilizados este verano, debido a las nuevas normas sanitarias para los campings tras la COVID-19 y a las características de los establecimientos, en donde los espacios abiertos y la naturaleza están muy presentes. Jurado es optimista al respecto: “Se han realizado nuevas ventas y se está reactivando de forma intensa el alquiler de autocaravanas, lo que demuestra que nuestro sector está muy vivo y puede ser clave en la recuperación turística este verano”.